La odisea del Prado

Sala Velázquez en el Museo del Prado, Madrid   Para mí los museos son como las personas; tienen personalidad, identidad y carácter. Por eso hay algunos aburridos y otros francamente divertidos, los hay pomposos, estimulantes y hasta descuidados. Pero -al igual que las personas-, también están los que se imponen por su sola presencia. Son pocos, […]